La contabilidad surge apoyada en las matemáticas, desde la representación
contable y medición de situaciones propias de la disciplina como por ejemplo,
procesos importantes que requieren del uso de modelos matemáticos que
permitan explicar situaciones en una realidad contable, como el caso particular
y clásico de la partida doble en el s. XVI la cual propone y resuelve una situación
conflictiva para los comerciantes de esa época sobre las relaciones entre los
acreedores y deudores a través del uso del sistema de numeración decimal.